INTRODUCCIÓN

INSTITUCIÓN EDUCATIVA MUNICIPAL CENTRO DE INTEGRACIÓN POPULAR

PROYECTO DE EDUCACIÓN PARA LA SEXUALIDAD Y CONSTRUCCIÓN DE CIUDADANÍA

VIVAMOS LA SEXUALIDAD

CON AFECTO Y RESPONSABILIDAD

 Al considerar la sexualidad como una dimensión humana se hace necesario que su ejercicio se convierta en un proceso saludable y gratificante, numerosos estudios e investigaciones sobre la teoría psicológica del apego (Bowlby, 1969 y López, F., Fuertes, A., 1989) demuestran que el ser humano experimenta necesidades primarias de carácter afectivo y relacional. Por lo tanto, el asumir la condición de seres sexuados implica la toma de decisiones sobre su propio cuerpo, el respeto a la dignidad del ser humano, la valoración de la pluralidad,  la construcción y vivencia de relaciones pacíficas, equitativas y democráticas, todo encaminado a la construcción de un proyecto de vida.

La Constitución Política de Colombia enuncia que " Todas las personas tienen derecho al libre desarrollo de su personalidad [...]" (Art. 16), "Las relaciones familiares se basan en la igualdad de derechos y deberes de la pareja y en el respeto recíproco entre todos sus integrantes [...]" (Art. 42), "La mujer y el hombre tienen iguales derechos y oportunidades (Art. 43), "Son derechos fundamentales de los niños: la vida, la integridad física, la salud y la seguridad social[...], el cuidado y amor[...]. Serán protegidos contra toda forma de abandono, violencia física o moral, secuestro, venta, abuso sexual, explotación laboral o económica y trabajos riesgosos (Art. 44), "El adolescente tiene derecho a la protección y a la formación integral"(Art. 45) y "Se garantiza a todas las personas el acceso a los servicios de promoción, protección y recuperación de la salud". (Art. 49)[1]. No obstante, la manera en que se vivencia la sexualidad en nuestro medio, no posibilita el crecimiento personal, familiar ni social de los/as estudiantes en la medida que se espera; las múltiples situaciones discordantes como la represión y abuso sexual, la discriminación,  la intolerancia, la violencia intrafamiliar, la desinformación y la carencia de servicios de salud para grupos específicos, son factores de riesgo que no favorecen ambientes propicios para un desarrollo integral equilibrado; por el contrario se suscitan acciones que se alejan de los criterios de ética social y personal, se incrementan los temores, los sentimientos de vergüenza, de culpabilidad, de creencias infundadas y de otros factores psicológicos que inhiben la actividad sexual o perturban los procesos de convivencia.

Esta realidad situacional toca la escuela y recurre a ella como una opción de apoyo social, donde esta crisis sea capaz de impactar el currículo y gracias a él convertirla en un agente activo y transformador de prácticas  sociales que atentan contra la dignidad de todo ser humano; sin embargo, aún se está lejos de alcanzar una integración aceptable en las aulas.

En los maestros y maestras de la lEM CENTRO DE INTEGRACIÓN POPULAR existe la conciencia que la población estudiantil que se atiende corresponde a un sector vulnerable expuesto a situaciones que atentan contra su bienestar físico, emocional y social tales como el hurto, el pandillismo, el porte de armas, el consumo de alcohol, tabaco y otras drogas, los embarazos no deseados, ETS, la desnutrición, el desplazamiento, la violencia intrafamiliar, el nacimiento de hijos no deseados, la desintegración familiar, la morbosidad y el abuso sexual entre otros.

Por consiguiente, la institución se anima a diseñar un proyecto ESCC que no pretende ser la panacea; sino el espacio educativo que dispone los momentos de aprendizaje para que los estudiantes exploren sus capacidades y habilidades, adquieran nuevos valores y actitudes, experimenten el ejercicio de la autonomía y la toma de decisiones, etc., con miras a la apropiación de hábitos y conductas saludables.

La sexualidad es una fuente de posibilidades maravillosas de placer, comunicación, reproducción, ternura y afecto, que puede vivirse de forma frustrante y llena de riesgos o sin riesgos y plena de sentido personal y relacional.

Definición

LA EDUCACIÓN PARA LA SEXUALIDAD Y CONSTRUCCIÓN DE CIUDADANÍA es un proceso  deliberado e intencionado que pretende la transformación de prácticas pedagógicas para facilitar la creación de ambientes favorables para que todas las personas de cualquier edad, género y condición social puedan incorporar en su cotidianidad el ejercicio de los derechos humanos sexuales y reproductivos, la perspectiva de género y la vivencia de la sexualidad que oriente su vida propio y la de los demás.

Propósito

La educación para la sexualidad es una oportunidad pedagógica que no se va a reducir a una cátedra o a un taller; sino que se concebirá como un proyecto macro y transversal que promueva la toma de decisiones sobre su propio cuerpo, promueva además el respeto a la dignidad del ser humano, la valoración de la pluralidad, la construcción y vivencia de relaciones pacíficas, equitativas y democráticas. Todo ello encaminado a la cimentación de su proyecto de vida.

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[1] Constitución política de Colombia. Título II. De los derechos, las garantías y los deberes. Capítulo l. De los derechos fundamentales. Artículos  16, 42, 43, 44, 45 y 49 respectivamente.